domingo, 1 de diciembre de 2013

¿Otra vez Vargas Llosa? FIL 2013

Este fin de semana inició una de las más grandes fiestas de las Letras, la FIL en su edición 27, galardonando a uno de los poetas más influyentes de la literatura francesa contemporánea: Yves Bonnefoy. Atrás quedaron los fantasmas de la anterior edición del Premio de Literatura en Lenguas Romances y el controvertido Bryce Echenique, acusado de plagio y del cual el presidente de la FIL, Raúl Padilla, dijera: "El daño ya se se hizo, fue una vergüenza", haciendo referencia al perjuicio que hicieron Jorge Volpi y compañía al otorgarle este galardón. Ahora en 2013, el jurado dictaminador comandado por Hugo Gutierrez Vega (recientemente reconocido con el Premio Nacional de Ciencias y Artes 2013), decidieron conceder de forma unánime el merecido galardón a este poeta francés.

Pero no todo fue fiesta. En las afueras de las inmediaciones de la Expo Guadalajara hubo un fuerte contingente policial para evitar que las protestas de los movimientos llamados "ContraFIL" y "1DMX" del Colectivo #YoSoy132 GDL, tuvieran eco en los participantes de este evento. Centenares de jóvenes se manifestaron en contra de las políticas de Israel (país invitado de honor) y por las arbitrarias detenciones de algunos simpatizantes de este movimiento, hace un año.

© Aidé Partida

Dentro de la FIL también hubo "acaloramientos". En el salón 3 se presentó el libro Otras voces y otros ecos del 68 en donde participaron Elena Poniatowska (Premio Cervantes 2013), Miguel Ángel Mancera (Jefe de Gobierno del DF), José Narro Robles (Director de la UNAM) y Carlos Payán (compilador del libro), este último quien prendiera fuego entre los asistentes al criticar la cantidad de manifestaciones que ocurren hoy en día en México, las cuales calificó como: "organizadas sin propósitos válidos". Este comentario causó repudio entre los asistentes los cuales chiflaron y murmuraron, incluso, algunos le increparon a gritos. Y qué decir del diálogo entre Shimon Peres (presidente del Estado de Israel y Premio Nobel del la Paz en 1994) y Felipe González (expresidente del gobierno español), el cual comenzó 40 minutos después de lo programado, y en donde se discutieron temas sensibles como el respeto de las identidades en una democracia.

La FIL abrió de nuevo sus puertas el domingo 01 de diciembre con el diálogo entre Mario Vargas Llosa (Premio Nobel de Literatura) y David Grossman (multipremiado escritor israelí), en el auditorio Juan Rulfo. El reconocido escritor peruano, quien presentó horas después su nueva novela "El héroe discreto", fue junto con Juan Cruz un interlocutor más de Grossman. Este último se llevó las ovaciones de la mañana por sus contundentes declaraciones: "los palestinos tienen el derecho de tener su propio Estado independiente, libre y soberano (...), a tener una vida normal, en la que no sean humillados como bloques, que no sientan la carga de la ocupación". El israelí cerró su participación con una lectura en hebreo, de un fragmento de su libro Más allá del tiempo


Otra vez Vargas Llosa. El peruano es por tercer año consecutivo, la estrella del evento, como alguna vez lo fueron Carlos Fuentes y Gabriel García Márquez. Sin embargo, este nuevo protagonista "ya cansó", perdió ángel (si es que alguna vez lo tuvo). Y eso quedó demostrado el día de hoy, donde el gran premio nobel quedó reducido, minúsculo ante Grossman. Lo mismo le sucedió el año anterior, en el 2012, ante Herta Müller (Premio Nobel de Literatura 2009). Y es que a los grandes escritores pareciera que les acompaña una cierta mística, una aura de intriga, de intelectualidad sufriente como ha sido el caso de Grossman en esta ocasión, Müller y Vallejo en 2012, Pamuk en 2011, Lobo Antunes en 2008, entre otros; caso contrario a Vargas Llosa, a quien se le escucha ramplón, con una escueta sencillez que raya en lo ordinario.

Y es que su insistente y repetitivo discurso edípico sobre el gran amor que tuvo a su madre, la gran lectora que fue, y de cómo él comenzó a escribir, suena hueco después de reiterarse tres años de forma consecutiva. Pareciera que al gran escritor (que lo es) se le acaba la imaginación ante las multitudes y sus palabras son parcas, quizá indiferentes. Probablemente sea hora de dejar de reciclar nombres en la FIL, y dar oportunidad a las otras voces contemporáneas del mundo literario, quienes "bien" pudieras apadrinar próximas ediciones. Aunque, ¿qué saben los Padilla sobre el tema de "dar paso a nuevas caras"?

Por otro lado, este mismo fin de semana se inauguró La Otra Fil, una feria alterna y contestataria a la superproducción de la UdeG, la cual intenta atraer la atención de los lectores sobre las editoriales y los autores independientes que no tienen cabida en la Feria Internacional del Libro. Para mayor información consultar: https://www.facebook.com/LaOtraFil.

Por último, entre los pormenores al rededor del inicio de la FIL 2013, algo que vale la pena destacar es el módulo de la editorial Santillana, quienes conmemoran al gran Julio Cortázar y a su gran novela Rayuela. Aquí les comparto algunas de las imágenes.
 



 




2 comentarios:

  1. De todo un poco Ricardo, por un lado las actividades programadas de la Feria y por el otro las protestas de los jóvenes en contra de las políticas de Israel, y como bien refieres en la actualidad muchos son los movimientos y las manifestaciones que carecen de sustento fundamentado por el bien común.

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